viernes, abril 27

 

Shakira, mi zapatilla, mi reloj y yo

(titulo al estilo narnia)

Shakira y yo definitivamente somos amigas. Yo constantemente la estoy llamando, le cuento mis problemas o le escribo un mail y ella sas!!, me hace una canción. En un principio, reconozco que no me gustaba mucho, pero en los dos últimos discos, me he sentido muy reflejada con varias canciones, aunque a veces, mi amiguis Shakira me las escribe un poco desfasadas de lo que acontece en mi vida, pero la perdono porque en las demás le achunta medio a medio.


Me gusta el estilo agresivo de Shakira, en especial esas canciones en donde esta dolida, pero se rehúsa a parecer una victima, (como hace la mayoría de las mujeres), o las canciones que hablan del amor desbordante, sin condiciones, explosivos… tal vez más que amor, esas canciones que hablan de atracciones incontenibles, (que me traen muchos recuerdos)

Cuando dio su concierto en el Estadio nacional fuimos con César gratis a cancha, gracias a una mega compra que hizo mi mami en Almacenes Paris.
Como César trabaja llegamos tipin 7 al estadio… nada que hacer pa’ quedar bien ubicados más que empezar a pegar codazos y mantenernos tiesos para que no nos movieran. Habían pasado como 1 hora y media y estábamos tratando de empujar a unos petaquitas cuando una barrera de seguridad se rompió (o alguien la abrió) y la gente empezó a pasar desde cancha al sector por donde entraba la gente de platea y del vip. Me quede inmóvil mirando, mi mente decía que corriera, pero mis pies estaban tiesos. Y cuando pensé que la situación se estaba empezando a controlar le digo a César que vallamos.
No Claudia, vamos a perder acá.
Vamos César,- y empecé a tirar, - déjame ir a ver, quédate tu acá,



Pero cesar no me soltaba la mano, hasta que de repente estábamos los dos corriendo. Y pasamos justo en el instante en que la seguridad empezó a cerrar y todos los ultimos nos metimos a presión y quedamos tan apretados que alguien se cayó y detrás de él se empezaron a caer todos, (como efecto domino) y yo sentía que el cuerpo se me iba y veía como la gente se iba cayendo un poco más adelante y como ese hoyo de gente en el suelo se acercaba a mi, pero algo me mantenía de pie… mi mente estaba tan concentrada en que si me caía la gente me iba a pisar y que hasta podía quedaba herida, que mi instinto de sobrevivencia, sumado a la fuerza increíble de César que no me soltó nunca, (y que en un instante se pareció a hulk) me mantuvieron en pie…
Pero sin zapatillas!!!!

Cuando salimos del tumulto y sobrepasamos a los caídos, César me tomo y empezó a caminar rápido para escapar de esa presión horrible y porque además los guardias estaban reteniendo a la gente. Cuando me salio la voz le digo… “Amor, mi zapatilla”…”¿Qué?”…mi zapatilla, se me salio en el enredo”…y me miro y me vio con un pie descalzo, entonces se dio media vuelta y fue a rescatar mi zapatilla.

Llegó con una muy parecida a la mía, y se cruzo con una niña (a quien también le faltaba una zapatilla) que le estiro los brazos y le dice “gracias… te pasaste” y le estiro la mano a la zapatilla, pero César la corre y le dice “no, es para mi polola”…jajaja…fue tan chistoso

Pa’ más remate la zapatilla no era mía, así que césar se devolvió, tiro la primera al lote de zapatillas botadas y busco la mía. Menos mal que estaba y nadie la había tomado por equivocación… (pobres personas que no pudieron encontrar sus zapatillas, demás que no falto el que se choreo alguna…jajaja)

Así llegamos al sector vip, ultra vip o extra vip, no sé a cual, pero tenia sumamente cerca de la Shakira. Pa’ que decir como alegaba la gente cuica, parecían pulga en el oído….pero no todo termino ahí.

Estábamos de pie en un pasillo, afirmados en una puerta de seguridad (que daba al sector recontra vip), cuando llegó una pareja demasiado loca. La mina me dice, “cuando apaguen las luces pa’ que empiece, abrimos la puerta y nos pasamos”, y me lo dijo tan suelta y patua que César me abrazó y me dice, Claudia, no se te valla a ocurrir hacerle caso a esta loca. Pero cuando apagaron las luces y la locrecia se abalanzó sobre la puerta y la abrió, algo inexplicable me hizo entrar con ella y su pololo…. Y justo encienden las luces y aparece un guardia que nos afirma como desesperado. Aquí cagué, pensé yo… pero como otras personas estaban tratando de abrir el otro extremo de la puerta el guardia nos dejo pasar y prefirió bloquear el paso a los que venían detrás…. Así quedamos con César separados por una reja…. Y yo parecía loca saltando con la primera canción de Shakira, (se me pego lo loca) y miraba para atrás y veia como César estaba tratándose de engrupir al guardia….jajaja…. fue chistoso porque cuando pase César no me quería soltar la mano, no me dejaba avanzar más y yo tenia el pasillo despejado pa’ estar más cerca… cuando vio que el definitivamente no podía pasar me soltó y me dijo, “ya ándate, ve a verla más adelante”…así súper resignado….jajajaja.

Menos mal que el guardia se apiado de él y lo dejo pasar como en la segunda canción. Y me ahí me paso lo peor, más que lo de la zapatilla perdida…. Me miro la muñeca izquierda y no tenia mi reloj Nike más top que nada en el mundo… “César mi reloj no esta”… pero me pesco la nada, tenia las hormonas revolucionadas con la Shakira moviendo el ombligo, así que me puse de rodillas y empecé a palpar el suelo pa’ ver si lo encontraba…. Y lo encontré po’, estaba debajo de una silla al lado de la puerta que asaltamos.


Al final, salio todo perfecto… vi a la Shakira ultra cerca (y la encontré más bonita que lo que uno ve en sus videos), recupere mi zapatilla y mi reloj, y lo pasé chancho…. Y todo gratis…. :)


jueves, abril 26

 

Mi dora Exploradora y mi Bob el destructor!!!....jajaja

El otro día la Trini se cayó de una silla. Cayó tan fuerte que quedó aturdida en el suelo, sin reaccionar boca abajo. Cuando mis tios sintieron el golpe, partieron súper rápido a ver que había pasado. Llegaron a la habitación y encontraron al nacho sentado en la cama lejos del lugar de los hechos con los bracitos cruzados y a la Trini casi desmayada, (el nacho estaba de visita).

Después de mucha preocupación y de darle los cuidados necesarios a mi dora exploradora, la dejaron dormir un rato.

Cuando despertó, mi tía Naye le dice “mi niña ¿cómo se cayo?”…

” No mamá, yo no me caí, el Nacho me botó... yo no le quise prestar el computador y me empujo de la silla”

Lo dijo de corrido y tan clarito que todo el mundo descansó… Estaba volviendo a la normalidad.

(Al Nacho nadie lo retó… esa estrategia de carita de angel y las manitos y pies cruzados son adorablemente irresistibles… y la representación de la caída que realiza cada vez que alguien se lo pide demasiado buena)


Áca, algunas fotigüis de estas dos cositas ricas que nos alegran y nos encantan día a día.
PD: a pesar de que mi trinita es una cagadita y el nacho un brutini, hay algo que se nota a simple vista y es que no importa que suceda, ellos se adoran.







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