jueves, enero 12
La Trini y el Nacho
Hace poco más de un año a mi familia llegaron dos nuevos integrantes: la Trinidad Emilia y el Ignacio Alejandro.

El caso del nacho fue un poco triste, es hijo de mi prima, la Coni que cuando quedó embarazada tenía solo 18 años, estaba recién salida del colegio y matriculada para estudiar en un instituto. Un día mi tía Ángela me llamó super preocupada y me dice “Claudia, a la Coni no le llega la regla, ¿tú sabes de algo para provocar que baje?”, yo, la que más sabe de esas cosas, obvio que no sabia nada po’, (llamaron a la más pava), entonces me comento que estaba preocupada porque su hija estuviera embarazada, con palabras que denotaban también el enojo que sentía. Le recomendé que le hiciera un test de embarazo, lo hicieron…salio positivo. Fue todo terrible desde ese momento. Incluso mi tía trato de que mi prima abortara y si no es porque en cada lugar que visitaron para ese fin le cobraban como medio millón de pesos (suma muy lejana a los alcances de su familia), es probable que hoy no tuviéramos entre nosotros, al bebe más chistoso que conozco, un guatón exquisito. Después de eso, tuvieron que asumir la situación, igual quedó la escoba con la familia del pololo, con el pololo, con mi prima y con mis familiares. Mi tía Naye (la mamá de la Trini), lloró como una semana con la noticia, es que después de todo la Coni era como su hija también, y además, solo una niña. Hoy las cosas están mucho mejor, la Coni sigue su pololo, que resultó un siete como papá, comenzó sus estudios y acaba de terminar su primer año ya, mi tía Ángela adora al Ignacio, y pa’ que hablar del Ignacio, tiene una sonrisa tan especial, como que ríe con los ojos, es como que dijera “que soy simpático yo”, cuando lo sacas a comprar canta todo el camino, es demasiado regalón, se muere sin su mamá y sin su abuela, y es un agrado estar con él, siempre y cuando no llore…jajaja. A todo esto, la madrina del Nacho es mi hermana Daniela.

El caso del nacho fue un poco triste, es hijo de mi prima, la Coni que cuando quedó embarazada tenía solo 18 años, estaba recién salida del colegio y matriculada para estudiar en un instituto. Un día mi tía Ángela me llamó super preocupada y me dice “Claudia, a la Coni no le llega la regla, ¿tú sabes de algo para provocar que baje?”, yo, la que más sabe de esas cosas, obvio que no sabia nada po’, (llamaron a la más pava), entonces me comento que estaba preocupada porque su hija estuviera embarazada, con palabras que denotaban también el enojo que sentía. Le recomendé que le hiciera un test de embarazo, lo hicieron…salio positivo. Fue todo terrible desde ese momento. Incluso mi tía trato de que mi prima abortara y si no es porque en cada lugar que visitaron para ese fin le cobraban como medio millón de pesos (suma muy lejana a los alcances de su familia), es probable que hoy no tuviéramos entre nosotros, al bebe más chistoso que conozco, un guatón exquisito. Después de eso, tuvieron que asumir la situación, igual quedó la escoba con la familia del pololo, con el pololo, con mi prima y con mis familiares. Mi tía Naye (la mamá de la Trini), lloró como una semana con la noticia, es que después de todo la Coni era como su hija también, y además, solo una niña. Hoy las cosas están mucho mejor, la Coni sigue su pololo, que resultó un siete como papá, comenzó sus estudios y acaba de terminar su primer año ya, mi tía Ángela adora al Ignacio, y pa’ que hablar del Ignacio, tiene una sonrisa tan especial, como que ríe con los ojos, es como que dijera “que soy simpático yo”, cuando lo sacas a comprar canta todo el camino, es demasiado regalón, se muere sin su mamá y sin su abuela, y es un agrado estar con él, siempre y cuando no llore…jajaja. A todo esto, la madrina del Nacho es mi hermana Daniela.

Hace poquito me junte con una amiga a tomar jugo de naranja/platano. Fue una conversación muy agradable, recordando viejos tiempos y contándonos los planes más cercanos. Hace tiempo que no nos veíamos, la note algo cansada o tal vez nostálgica. Note que usaba el mismo perfume antes que ella notara que el mió también es el mismo, (no se lo comente), y al despedirnos sentí unas sinceras ganas de abrazarla. Solo quería decirle, que le deseo lo mejor del mundo, que la quiero mucho y que siempre tendrá en mi una sincera amiga.
Comments:
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El otro día me encontre a tu prima y al Ignacio en el super, esta super grande y no es tan guaton como tu dices...bueno, un poco.
Besitos
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Besitos
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